¡Alto a la masacre en Palestina! Apoyo al pueblo palestino

Comunicado de la coordinación del AIT del 16 de mayo de 2018
Una masacre. Es una verdadera masacre la que acaba de perpetrar el ejército israelí disparando con fuego real sobre una multitud que se manifestaba pacíficamente, ocasionando 60 muertos, miles de heridos, 60 de los cuales están entre la vida y la muerte cuando escribimos estas líneas.
En el mismo momento, Trump y sus representantes se felicitaban por el traslado de la embajada norteamericana a Jerusalén. Trump y su representante en la ONU han felicitado al gobierno Netanyahu por “haber demostrado moderación” La Unión Europea, intentando desmarcarse de la brutalidad de Trump, condena los actos violentos, llama a la moderación de ambas partes, como si hubiese igualdad entre los que disparan a la multitud y los que se manifiestan pacíficamente. A nadie pueden engañar los “argumentos” esgrimidos para reprimir a los palestinos, so pretexto de lucha contra el terrorismo, de seguridad e incluso de legítima defensa. ¿Quién puede creer ni por un instante esas contraverdades que intentan ocultar el hecho de que esas manifestaciones cuestionan la estructura constituida bajo la égida del imperialismo?
Son esos mismos gobiernos los que, por cuenta de los intereses de las multinacionales, provocan las guerras y los conflictos en todo el planeta.
Decenas de miles de palestinos de Gaza se manifestaban contra el bloqueo de Gaza y por el derecho al retorno. Gaza es, en efecto, la mayor prisión del mundo a cielo abierto, un auténtico gueto en el que “viven”, en 360 kilómetros cuadrados, 2 millones de personas, es decir, 5 400 habitantes por km2, una de las mayores densidades del mundo.
Esta franja en la que sólo hay electricidad unas horas al día, en la que todo falta, en particular los medicamentos, en la que no hay trabajo, sufre el bloqueo organizado por el Estado de Israel y por Egipto, que controlan los muros y las barricadas que cercan la franja de Gaza. Contra ese bloqueo se manifestaban decenas de miles de gazatíes que son, esencialmente, descendientes de los 800 000 palestinos expulsados por la fuerza de sus pueblos y de sus casas en 1948, en el momento de la creación del Estado de Israel.
En todos los territorios en los que viven los palestinos, en Cisjordania, en Galilea, y en todas las fronteras de 1848 (Estado de Israel), la emoción está en su punto álgido y así lo atestiguan las manifestaciones que se están desarrollando, ya que es todo un pueblo el que ha sido golpeado y es un solo pueblo el que se levanta contra la represión y la opresión. Y la juventud palestina, que rechaza todo lo que pretenden imponerle, que no se reconoce en las diferentes “soluciones” que intentan plantearle, se moviliza masivamente porque no tiene otra opción.
La Marcha del Retorno suscita, en efecto, la cuestión del derecho de los palestinos a volver a sus pueblos y sus casas, de los palestinos de Gaza, de Cisjordania, de Líbano, de Jordania, de Siria… El derecho al retorno concierne a 6 millones de palestinos, exiliados, encerrados en campamentos, sometidos s la opresión y a la represión.
Esta reivindicación choca con todos los acuerdos que se han establecido bajo los auspicios del imperialismo norteamericano. Los numerosos militantes palestinos que participaban en la conferencia mundial abierta contra le guerra y la explotación en diciembre de 2017 en Argel lo afirmaban claramente: los acuerdos de Oslo, en 1993, la división y el reparto de pedazos de territorios palestinos bajo control de la autoridad palestina, se alzan contra la soberanía y el derecho a la nación de los palestinos. El conjunto de este dispositivo busca en realidad proteger al ocupante y reprimir al pueblo palestino.
Desde los acuerdos de Oslo que se suponía iban a encontrar una “solución”, hace veinticinco años, el pueblo palestino no ha dejado de ser reprimido, golpeado, masacrado.
Sólo hay un camino para establecer la paz en esta región, es poner fin al apartheid contra el pueblo palestino. Por lo que apoyamos incondicionalmente el derecho al retorno de todos los refugiados palestinos a sus pueblos y a sus casas de origen, el derecho a la tierra, el derecho a la soberanía nacional.
¡Apoyo incondicional al pueblo palestino!
Llamamos a todos los militantes, organizaciones que participan de las actividades del Acuerdo Internacional de los Trabajadores y de los Pueblos, a estar en primera línea del combate en defensa del pueblo palestino contra la masacre perpetrada por el ejército israelí con el apoyo de Trump.
Luisa Hanune, secretaria generaldel Partido de los Trabajadores (Argelia)
y Dominique Canut, miembro del buró nacional del Partido Obrero Independiente (Francia),
coordinadores del AIT
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